Las barras para remolcar bicicletas infantiles desde una bici de adulto es un elemento muy práctico para hacer salidas con los más pequeños. Su uso tiene varios aspectos positivos: es un elemento extraíble, se puede usar cuando convenga, incluso cuando el adulto arrastra al pequeño éste puede seguir pedaleando, es relativamente ligero y también relativamente barato…
¿Para qué sirve la barra?
La barra sirve perfectamente para aliviar el cansancio de los niños cuando ya han dicho “basta” y salvar el día a un padre agobiado porque llegan tarde a comer, por ejemplo. El adulto arrastra al pequeño sobre su bici, que reduce la fricción sobre el terreno al elevar la rueda delantera. Lo que facilita la conducción del adulto y la agilidad en el pedaleo.
Pero muchos usuarios se preguntan sobre la legalidad de esta barra de remolque. Tras la última modificación de la Ley de Tráfico la DGT limitó el uso de este tipo de elementos. Los remolques adaptados para niños solo están permitidos para transportar niños en vías urbanas o reservadas para bicicletas. Es decir, nada de usarlo en carreteras, sean del tipo que sean, pero sí que pueden usarse en el ámbito urbano (atentos porque las normativas municipales pueden variar) y en parques ciclistas, vías verdes, etc.