La Titan Desert se ha puesto hoy en marcha con la disputa de la primera etapa entre Maadid y Erg Chebbi. Si otros años, la carrera se ha iniciado con una etapa más o menos “asequible”; en esta edición 2017, los participantes se han enfrentado a un duro recorrido de 105 km y unos 1000 m de desnivel. Una ruta complicada, con mucho terreno pedregoso, algo de arena y el inconveniente añadido de un considerable viento de cara… y, por supuesto, el calor.
Nuestro tándem
Formado por Joan Font e Ignasi Ávila han tenido una actuación muy destacada. Han rodado muy cerca de la cabeza de carrera durante la primera mitad de la etapa, pero un inoportuno pinchazo les ha retrasado. Pese a ello, el dúo de Cofidis ha aprovechado el terreno favorable de los últimos 30 km para recuperar distancia y llegar a meta en un más que meritorio 19º puesto. En la llegada, unos Font y Ávila muy enteros han explicado que, además del pinchazo, los tramos dunas les han perjudicado bastante, ya que debido el peso extra del tándem les hace inevitable hundirse en la arena y acabar con el pie a tierra.
En cuanto a nuestros otros más que titanes en la Titan Desert 2017, Xavier Caballol ha luchado como un jabato contra todas las adversidades y ha finalizado la etapa en poco más de ocho horas. Un genial resultado que podría haber sido mejor de no ser por las complicaciones que suponen para él los pasos arenoso, especialmente en el último tercio de la ruta.
Por su parte, Marc Isern y Manuel Fernández han luchado hasta el límite y han salvado por apenas 10 minutos el fuera de control. Un rendimiento más que meritorio para nuestros más que titanes, ya que al esfuerzo físico propio de esta dura carrera hay que sumar la losa mental de las caídas. Y de esas, nuestro Manuel ha sufrido hoy unas cuantas… Pese a todo, han llegado a meta y han logrado ya su primer gran paso para lograr ser #másquetitanes. ¡Mañana más!