La catedral de Burgos acoge la salida de la primera etapa de una carrera humilde pero que este año ha cobrado una importancia vital para el ciclismo mundial, la Vuelta a Burgos 2020.
Carapaz, Ramiro Sosa, Valverde, Marc Soler, Enric Mas, Simon Yates, Aru, De la Cruz, Evenepoel, Esteban Chaves, Landa, Nairo Quintana, Mads Pedersen… todos estos primeros espadas del ciclismo profesional estarán este martes 28 de julio en la primera línea de salida de la Vuelta a Burgos 2020.
La Ronda castellana se ha convertido, debido a la pandemia por la Covid19, en una cita ciclista internacional de primer nivel. La carrera mantiene su categoría anterior, pero los principales equipos del World Tour no han querido perderse esta primera cita de una temporada de lo más extraño.
Burbuja sanitaria
Los ojos de todo el mundillo ciclista estarán puestos en esta modesta ronda de cinco etapas y cuya organización ha establecido un protocolo de seguridad sanitaria para el conjunto de las 1.300 personas que trabajaran en la burbuja de la Vuelta a Burgos. En el protocolo sanitario han colaborado tanto la UCI como el Consejo Superior de deportes; las medidas incluyen acceso restringido a las salidas y llegadas de las etapas y, sobre todo, una serie de normas para mantener a salvo la “burbuja sanitaria” tanto durante las etapas como al acabar las mismas.
La Vuelta a Burgos finalizará el próximo domingo 1 de agosto en una etapa ya clásica con final en las Lagunas de Neila, de categoría especial.
Esta ronda española será, como decimos, histórica porque supone el pistoletazo de salida a una temporada ciclista 2020 muy extraña. Si todo va bien, el resto de las competiciones programadas se sucederán de manera frenética: ese mismo domingo arrancará la Ruta de Occitania (1-4 agosto) y ese mismo día se correrá la primera gran clásica ciclista del año: Strade Bianche.
Esperemos por el bien de todos que todo salga muy bien y que la seguridad y salud de de ciclistas, staff y organizadores se mantenga a salvo.
¡Arrancamos!
