Desde este espacio ya hemos propuesto algunos ejercicios y actividades para que los más pequeños vayan mejorando su equilibrio y técnica sobre la bicicleta. Para un segundo nivel, cuando los niños ya demuestran cierto dominio de la máquina, ya podemos medir las destrezas de cada uno en grupo con una actividad divertida en la que lo importante es no poner pie a tierra.
La ‘encerrona’ consiste en acotar un espacio y que todos los niños –conviene que sea un grupo de varios, como mínimo cuatro o cinco- vayan circulando sin un rumbo fijo ni orden, cada uno a su libre albedrío y buscando poner en problemas al resto para que bajen el pie al suelo. Todo esto, claro, sin llegar a exponer a nadie a una situación de peligro real, que no se dará porque la velocidad es muy baja.
Poco a poco, el monitor debe ir reduciendo el espacio, y los niños circulando sin salirse y buscando que los demás pongan el pie en el suelo. Cada vez será más difícil que los niños puedan circular porque el espacio irá siendo poco a poco más reducido. Obviamente, gana el juego el que más tiempo aguante subido sobre la bici y haya conseguido que todos los demás tengan que bajarse.
Con este sencillo juego conseguiremos grandes avances en la técnica y el equilibrio, sobre todo en lo que se refiere a mantenerse de pie en la bici sin pedalear, pues a veces el espacio obligará a jugar con los golpes de pedales para poder mantener la posición, no salirse de la zona acotada y no quedar eliminado del juego.
Hay numerosas actividades más
Pero el juego de ‘la encerrona’ suele tener un gran éxito entre los niños. Además, entra también en liza el factor del temple sobre la bicicleta, ya que muchos niños pueden llegar a bajar el pie no tanto por su falta de destreza técnica sino, sobre todo, por una cuestión de seguridad en sí mismos. Y tampoco está mal reforzar ese tipo de comportamientos.