Tipo de suspensión de bicis: Funcionamiento y mantenimiento

La suspensión de una bicicleta es un componente fundamental de nuestras bicis ya que influye en la comodidad y el rendimiento durante la conducción. En esta entrada ofreceremos una visión clara y amigable sobre el tipo de suspensión que existe, su funcionamiento y el mantenimiento que debemos darle.

¿Qué es la suspensión de una bicicleta?

Empecemos por lo principal: ¿qué es la suspensión? Cuando hablamos de la suspensión de la bicicleta nos referimos al sistema de componentes que permite que las ruedas de la bicicleta se muevan independientemente del cuadro. Además, este sistema se ocupa de absorber los impactos de las superficies irregulares. Gracias a la suspensión mejoramos la estabilidad, el control y la comodidad cuando pedaleamos.

¿Qué componentes integra la suspensión de la bici?

Los sistemas de suspensión generalmente están compuestos por:

• Horquillas: Se encuentra en la suspensión delantera y es el mecanismo que sirve para la absorción de impactos.
• Amortiguadores: Lo encontraremos en la suspensión trasera y ayudan a controlar el movimiento de la rueda trasera.
• Muelles: Proporcionan la fuerza necesaria para que el sistema vuelva a su posición original después de una compresión.

¿Qué tipos de suspensión de bici existen?

Podemos resumir todo en dos tipos principales de suspensión en las bicicletas:

1. Suspensión delantera:

Sirve para proporciona comodidad y control en terrenos irregulares sin agregar mucho peso. La suspensión delantera no se incluye en todas las bicicletas. Su presencia varía según el tipo de bicicleta y su diseño específico. Dependiendo del tipo de bici podemos encontrarlas con suspensión delantera:

1. Bicicletas de montaña: Generalmente incluyen suspensión delantera (también conocida como horquilla de suspensión).
2. Bicicletas de carretera: Normalmente no tienen suspensión delantera. Estas bicicletas están diseñadas para la velocidad en superficies lisas, y la falta de suspensión ayuda a mantener el peso bajo y la rigidez alta.
3. Bicicletas híbridas: Suelen incluirla. Estas bicicletas combinan características de bicicletas de montaña y de carretera, de ahí que la incluya.
4. Bicicletas de paseo o cruiser: Algunas las tienen, pero no es una característica común. Estas bicicletas suelen estar más enfocadas en la comodidad y la estabilidad.
5. Bicicletas de BMX: No incluyen suspensión delantera. Están diseñadas para la agilidad y el rendimiento en acrobacias, donde la rigidez es preferible.

2. Suspensión completa o doble:

Básicamente, su función es absorber los impactos y es ideal para terrenos difíciles, pero hace que la bici sea más pesada y costosa. La suspensión trasera no se incluye en todas las bicicletas y su presencia depende, al igual que con la suspensión delantera, del tipo de bicicleta y su propósito específico:

1. Bicicletas de montaña: Frecuentemente incluyen suspensión trasera. Este tipo de suspensión (suspensión completa) es muy común en bicicletas de montaña, ya que permite una mejor absorción de impactos en terrenos difíciles, mejorando el control y la comodidad.
2. Bicicletas de trail y enduro: Siempre tienen suspensión trasera. Estas bicicletas están diseñadas para manejar descensos y terrenos accidentados, donde se requiere una mayor capacidad de absorción. Por esa razón, siempre se incluye.
3. Bicicletas de carretera: No suelen tener suspensión trasera. Las bicicletas de carretera están diseñadas para velocidad y eficiencia en superficies lisas, por lo que la falta de suspensión trasera contribuye a una mayor rigidez y eficiencia.
4. Bicicletas híbridas: Pueden tener suspensión trasera, aunque no es tan común como la delantera. Si la tienen, está diseñada para ofrecer comodidad en una variedad de superficies, aunque muchas se centran solo en la suspensión delantera.
5. Bicicletas de paseo o cruiser: A veces tienen suspensión trasera, pero no es una característica estándar. Pueden estar diseñadas para la comodidad en trayectos urbanos, pero muchas veces optan por una estructura rígida.
6. Bicicletas de BMX: No incluyen suspensión trasera. Estas bicicletas están diseñadas para la agilidad y la resistencia durante saltos y acrobacias.

¿Cómo funciona la suspensión?

La suspensión trabaja absorbiendo la energía de los impactos, permitiendo que la rueda se desplace hacia arriba y hacia abajo, mientras que el cuadro de la bicicleta permanece relativamente estable. Este proceso se realiza mediante el uso de muelles y amortiguadores que controlan el movimiento.

¿Cómo realizar el mantenimiento de la suspensión de la bici?

Para garantizar un rendimiento óptimo de la suspensión, es importante llevar a cabo un mantenimiento regular. Aquí te indicamos qué debes hacer:

1. Revisar la presión del aire:

Se recomienda verificar la presión del aire al menos una vez al mes o antes de cada salida, especialmente si haces rutas con frecuencia.

Cómo hacerlo:

• Utiliza un manómetro para obtener lecturas precisas de la presión.
• Consulta el manual del fabricante para conocer las especificaciones de presión adecuadas para tu peso y estilo de conducción.
• Asegúrate de que la válvula esté completamente cerrada después de ajustar la presión para evitar fugas.

2. Lubricar los componentes

Debemos prestar especial atención a las partes movibles de la horquilla delantera y los amortiguadores traseros. Presta atención a la periodicidad de la lubricación, debes hacerlo cada pocos meses o después de una lluvia intensa o condiciones polvorientas.

Para hacerlo, puedes usar cualquier tipo de lubricante que sea específico para suspensiones, ya que están formulados para resistir la presión y el desgaste. Evita aceites que puedan dañar los sellos.

3. Limpia los sellos

Los sellos son cruciales para evitar la entrada de suciedad y humedad, que pueden dañar el sistema de suspensión. Recuerda limpiar los sellos cada vez que laves tu bicicleta o después de montar en condiciones húmedas o polvorientas.

Cómo hacerlo:

• Con un paño suave, limpia cuidadosamente los sellos de la horquilla y los amortiguadores. Asegúrate de que no queden residuos.
• También puedes usar un líquido de limpieza específico para bicicletas si es necesario.

4. Revisar el desgaste

Realiza inspecciones regulares de los componentes de la suspensión, prestando atención a cualquier signo de daño, como abolladuras, rasguños o fugas de aceite.

Qué revisar:

• Verifica los muelles y amortiguadores en busca de signos de desgaste.
• Asegúrate de que los tornillos y fijaciones estén bien ajustados.

5. Ajustar el rebote y la compresión

• Rebote: El rebote se refiere a la velocidad con la que la suspensión vuelve a su posición original después de comprimir.
• Comprensión: La compresión se refiere a cómo se comprime la suspensión bajo impacto.

Cómo ajustarlo:

Muchos sistemas de suspensión tienen diales o controles que permiten ajustar la configuración de rebote y compresión. Esto se debe ajustar según tu peso, estilo de conducción y tipo de terreno. Realiza pruebas de manejo después de hacer ajustes para asegurarte de que la configuración es adecuada para tus necesidades.

La suspensión de tu bicicleta es un elemento crucial para disfrutar de un viaje cómodo y seguro. Mantenerla en buen estado no solo prolonga la vida útil de tu bicicleta, sino que también mejora tu experiencia en cada paseo. Sigue leyendo más sobre consejos ciclismo en el apartado Mantenimiento bicicleta.