Utrecht es una ciudad relativamente central de los Países Bajos, relativamente grande, relativamente lejos de la costa. Utrecht es el lugar del Grand Départ del Tour de Francia 2015, un hervidero en el cual se concentra toda la farándula de la mayor carrera ciclista, el tercer evento deportivo más grande del mundo, antes de partir, cruzar Bélgica y girar por Francia durante tres semanas.
El recorrido propuesto es divertido e interesante
En su primera mitad propone una guerra de nervios con dos contrarrelojes, tres esprints, tres finales en cuesta y una jornada, la de pavé, que todos temen. Estas nueve etapas iniciales prometen generar diferencias y eliminar a varios favoritos. Después, en las doce restantes, tocará definir la general y la victoria absoluta, ese maillot amarillo al cual todos aspiran. Para ello habrá siete finales en alto, algunos de tanta enjundia como Plateau de Beille o Alpe d’Huez, y muchísimos puertos de paso como Croix de Fer o Tourmalet. Serán casi ochenta horas de competición ciclista en carretera antes de llegar a los Campos Elíseos donde, ahí sí, los ciclistas pasearán y disfrutarán de la gloria de la cual se harán acreedores durante todo el mes de julio.
Entre los aspirantes al amarillo, cuatro hombres que han ganado siete de las ocho últimas grandes vueltas ciclistas que se han disputado. El favorito número uno por su condición de campeón saliente es Vincenzo Nibali (Astana), un as de los descensos y muy inteligente tácticamente. El ganador del Tour en 2013, Chris Froome (Sky), destaca por su fuerza bruta y la solidez de su equipo en ciclismo de montaña. Desde Colombia llega Nairo Quintana (Movistar Team), el mejor escalador del mundo, con un colmillo largo y retorcido para aprovechar los momentos de debilidad de los demás. Y por último está Alberto Contador (Tinkoff-Saxo), el ídolo de la afición por su clase, por su agilidad, por su valentía y por su reto de encadenar la ‘maglia rosa’ de mayo con el ‘maillot jaune’ en julio.
A su alrededor, decenas de candidatos a perturbarles y a aprovechar el río revuelto. En el contingente español destaca el nombre de Purito Rodríguez (Katusha), que buscará aprovechar un recorrido que le viene como anillo al dedo; también estará Alejandro Valverde (Movistar Team), aunque supeditado a Quintana. El bloque francés está liderado por Thibaut Pinot (FDJ), tercero del pasado Tour, con jóvenes ciclistas como Romain Bardet (Ag2r) o Warren Barguil (Giant-Alpecin) dispuestos a brillar y un experto como Jean-Christophe Péraud (Ag2r) anhelando repetir su segundo lugar del año anterior. Los estadounidenses Tejay van Garderen (BMC) y Andrew Talansky (Cannondale) son completos y llegan en gran forma. El neerlandés Bauke Mollema (Trek) es garantía de solidez… ¡Y así podríamos seguir horas!
Es un Tour, en definitiva, cuya pelea por la general está repleta de estrellas y candidatos a sorpresa. Así será también en los esprints, en los que la ausencia de Marcel Kittel deja abierta la contienda para Mark Cavendish (Etixx), Alexander Kristoff (Katusha) y André Greipel (Lotto-Soudal), frente a otros retadores de talla más ligera y demarraje más ágil como John Degenkolb (Giant-Alpecin), Michael Matthews (Orica-GreenEdge), Peter Sagan (Tinkoff-Saxo)… o Nacer Bouhanni.
Ahí está la gran baza del equipo Cofidis para brillar en este Tour de Francia. El velocísimo Nacer Bouhanni llega en racha a Utrecht, plenamente recuperado de una caída en el campeonato nacional galo y con un bloque bien conjuntado a su alrededor. De cara a las nueve jornadas favorables para sus características será lanzado por Julien Simon, Geoffrey Soupe, Christophe Laporte, Florian Sénéchal y el belga Kenneth Vanbilsen. También bregarán para él Nicolas Edet y el ‘Lince Andaluz’ Luis Ángel Maté. Estos dos últimos serán, junto a Dani Navarro, las bazas para la alta montaña. Han pasado ya siete años desde la última victoria ‘roja’ en el Tour: este mes de julio romperemos la mala racha.
