El holandés Tom Dumoulin se adjudicó el Giro de Italia 2017, y lo hizo empleando su mejor arma: las prestaciones contra el crono. El del Sunweb se empleó a fondo en la última etapa de la ‘corsa rosa’ entre Monza y Milán, para pasar de la cuarta a la primera posición de la general. Un salto que nunca antes, había ocurrido en la historia de las grandes carreras ciclistas. Dumoulin superó a Pinot, Quintana y Nibali para apuntarse su primera gran carrera ciclista con las mismas prestaciones que lo hacía el gran Miguel Indurain, gran rendimiento contra el crono y resistir en la alta montaña. De ahí que le comparen con el campeón navarro.
Sin embargo, Dumoulin ha sufrido como nunca por conseguir este Giro. Hasta la última jornada llegaron nada menos que cinco corredores en menos de 90 segundos en la general, y cuatro de ellos tenían serías opciones de ganar la carrera. Algo realmente insólito para una competición tan dura como se había planteado este Giro 2017. Tras su espectacular triunfo en el santuario de Oropa, donde el holandés pudo arañarle unos segundos a Quintana, el triunfo de Dumoulin se ha cimentado en el sufrimiento y la resistencia, sobre todo en la última semana de Giro en la que casi en cada etapa ha cedido algo de tiempo.
La viva imagen de ese sufrimiento fue cuando al poco de iniciar la última subida de la etapa reina, el entonces líder tuvo que bajarse a toda prisa de la bici y desvestirse para hacer de vientre a un lado de la carretera… ¡algo nunca visto y que por el tiempo perdido le pudo haber supuesto perder el Giro!
En esta última semana
Quintana, Nibali, Pinot, Zakarin, Pozzovivo han atacado al holandés constantemente. Pero el holandés siempre ha mantenido la carrera fría y nos ha recordado un esquema de carrera que es ya un clásico del ciclismo: el dominador de las cronos contra los escaladores. En más de una ocasión, estos le llegaron a distanciar, pero entre su saber hacer y las alianzas con otros equipos, Dumoulin tuvo suficiente para mantener a sus rivales en la distancia adecuada para sus prestaciones en una crono de 30 km.
Sin duda, este Giro del Centenario ha sido duro, muy disputado y emocionante. Y además nos ha regalado una última etapa, que en otras carreras ciclistas es meramente testimonial, llena de emoción e incertidumbre por una clasificación general muy ajustada.
#Giro100
