Lo más interesante de esta última semana en La Vuelta 2017 ha sido la disputa del tríptico de etapas de montaña en Andalucía. Calar Alto, La Pandera y Sierra Nevada han servido para definir, sobre todo, dos aspectos de la carrera. Froome se mantiene firme en el liderato y (pese a algún que otro despiste y caída como el día de Antequera) parece tener la situación controlada. Sobre todo si atendemos que mañana puede ser un día clave para la resolución de esta Vuelta a España. La crono de 40 km en Logroño marcará unas diferencias importantes, y definirá la clasificación general de forma mucho más clara antes de que dispute el gran “fin de fiesta de la Vuelta” en el Angliru.
Sin duda, Froome parece que lo tiene todo a favor para llevarse por fin su Vuelta. A pesar de que las diferencias en la general no son muy amplias, ni Nibali, ni Contador, ni ninguno de los grandes escaladores parecen tener fuelle para desbancar al británico y su gran equipo. Otros como David de la Cruz, Fabio Aru y Esteban Chaves parecen haber perdido ritmo respecto a la primera semana… Por si esto no fuera suficiente, los Nieve, Moscon y Poels, están rindiendo a un gran nivel y prácticamente nunca han dejado solo a su líder en los momentos clave de la carrera ciclista. De hecho, el propio Wout Poels es décimo en la general…
Para los que ansían un final de La Vuelta más ajustado la gran esperanza debería ser el rendimiento de menos a más del colombiano Miguel Ángel López. El del Astana, de solo 23 años, ha ganado dos etapas esta semana (Calar Alto y Sierra Nevada) y fue segundo en otra (La Pandera). Sin duda, está demostrando ser el mejor escalador de la carrera y él único que ha rendido por encima del nivel que mostró en la primera semana. Su asalto al podio parece un hecho, pero tendrá que firmar mañana una buena crono.
Junto a él, Nibali, Kelderman y Zakarin tienen la complicada tarea de evitar que Froome se distancie demasiado en los de 40 km de pedaleo individual y nos prive de un final de Vuelta espectacular, como el que todos queremos. De momento, están a unas diferencias esperanzadoras, pero Froome es mucho Froome en una crono de 40 km.