La Volta a Catalunya tenía como gran aliciente la nómina de participantes que se había congregado en la línea de salida. Chris Froome, Nairo Quintana, Alberto Contador, Van Garderen, Richie Porte, Fabio Aru, Daniel Martin, Joaquim Rodríguez y un larguísimo etcétera de grandes nombres del ciclismo de carretera que configuraban un cartel inicial que cualquier carrera soñaría, pero probablemente sólo veamos repetido en el Tour de Francia.
El ‘otro’ duelo era el de los sprints, donde estaba presente un Nacer Bouhanni que tenía enfrente a Ben Swift (Sky), Davide Cimolai (Lampre-Merida) o Gianni Meersmann (Etixx-QuickStep) como principales rivales en la lucha por las victorias de etapa ciclista. Pero lo cierto es que el velocista francés del equipo Cofidis fue manifiestamente superior a todos. Bouhanni consiguió ganar dos etapas en la ronda catalana y elevar ya a cuatro su historial de victorias en esta temporada, en la que sin duda se está mostrando mucho más madrugador que en 2015.
Primero fue en la sinuosa e incómoda etapa inicial de Calella. Si bien el año pasado una fuga mal controlada acabó por hacer camino y llegar a meta, para esta vez el pelotón tenía la lección aprendida. Primero el equipo Cofidis y luego Movistar tiraron del gran grupo – al que le faltaba la mitad de participantes – hasta que se planteó la llegada final. Bouhanni agarró la rueda de Swift, lo adelantó y entró vencedor sin resistencia alguna.
La segunda llegó al día siguiente, en Olot, cumpliendo con una antigua ‘tradición’ de la Volta que no se refrendó en la pasada edición. Y es que, desde que la carrera ciclista sale en Calella, el corredor que gana el primer día lo hace también al siguiente. Así ocurrió en 2013 con Meersman y en 2014 con Mezgec. Bouhanni también hizo lo propio, dejando al equipo Cofidis con el saco lleno antes de que empezasen los días decisivos.
Y en la montaña, aunque el duelo estuvo parejo finalmente fue Nairo Quintana quien se llevó el gato al agua. Un triunfo que supone, además, una importante batalla moral para el colombiano frente a los que serán sus próximos rivales en el Tour. Contador volvió a ser segundo, igual que en París-Niza hace unas semanas, y Daniel Martin cerró el podio. Mientras tanto, Froome acabó en una octava posición que para un hombre como él se antoja discreta. Y Aru ni siquiera logró entrar en el Top10. Una zona de honor que el asturiano Dani Navarro rozó con la punta de los dedos, aunque al final se tuvo que conformar con la 13º plaza. Eso sí, Dani se mostró ambicioso y lanzó varios ataques, el último de ellos en las calles de Barcelona, con el circuito de ocho pasos por Montjuic. Su aventura fue neutralizada a apenas cinco kilómetros de meta, ya en la última vuelta.
Fuera de la ronda catalana
Peter Sagan se estrenó como Campeón del Mundo en la Gent-Wevelgem y durante el fin de semana se disputó el Criterium Internacional (2.HC) en la isla de Córcega. La victoria de Thibaut Pinot fue más que contundente en L’Ospedale. Además de la general y la etapa reina, también se hizo con la crono en Porto Vecchio. Segundo fue Pierre Latour (AG2R-La Mondiale), prometedor corredor francés de 22 años. Y la gran sorpresa fue el ascenso al podio de Sam Oomen (Giant-Alpecin), que tan sólo tiene 20 años. El neerlandés dejó fuera del cajón final por unos segundos a Arnold Jeannesson, que fue tercero en la jornada final, pero cuarto de la general.
El World Tour se toma ahora un respiro de unos días hasta el Tour de Flandes, que será este próximo domingo. Y sirvan estas últimas líneas para recordar a Antoine Demoitié, corredor del Wanty-Groupe Gobert que falleció la noche del domingo tras ser atropellado por una moto. Su pérdida ha reavivado –aunque ya llega tarde- el debate sobre la seguridad y la exagerada presencia de vehículos en carrera. Tomar medidas lleva tiempo siendo necesario. Esperemos que no se demoren más. Vayan desde aquí nuestras condolencias a su familia y allegados. Descanse en paz.