Todos parecían contentos ayer tras la presentación del recorrido del Tour de Francia 2016. Tanto el actual ganador Chris Froome como sus acompañantes en el podio de este año, Nairo Quintana y Alejandro Valverde, se mostraron contentos con un trazado que, con algunas variaciones, se parece bastante al de la última edición. La inclusión de una crono individual de 37 km en la 13ª etapa es la principal novedad. Una novedad que en teoría beneficia más al actual campeón que a sus rivales. Otra crono, esta vez en cuesta y de 17 km, se disputará ya en la última semana de competición.
Los organizadores del Tour de Francia 2016 siguen buscando novedades y siguen jugando con la tradición, en busca del equilibrio. Es importante comentar que antes de la llegada de los Pirineos, en la 5ª etapa, se ha programado la primera llegada en alto con final en la estación de esquí de Le Lioran (macizo Central). Recordemos que en el Tour de 2012, el Sky y Bradley Wiggins casi sentenciaron la carrera ciclista en una etapa muy similar en la primera semana.
En 2016 se llegará primero a los Pirineos con una etapa clásica entre Pau y Bagnères-de-Luchon (8ª) con el Tourmalet al inicio. La buena noticia para los aficionados españoles es que la “etapa reina” de los Pirineos se disputará entre Viella y Andorra (9ª), e incluirá los pasos de montaña de La Bonaigua y el Cantó. En Andorra, se tomará la Grande Boucle, el primer día de descanso. Sin embargo, parece que las etapas más importantes y llamativas para el espectador se concentran en la segunda mitad de la competición ciclista. La etapa 12ª, el Tour vivirá su particular homenaje a la tradición (precisamente el 14 de julio) con un final en el Mont Ventoux. Al día siguiente la decisiva crono, aparentemente llana, de 37 km, antes de afrontar el interesante bloque alpino.
Los Alpes serán suizos
Los Alpes tendrán varias etapas ciclistas en este Tour, pero con protagonismo para la parte suiza del macizo y sin apenas presencia de los grandes puertos clásicos. Ni Galibier, ni Izoard, ni Alpe d’Huez, ni Glandon… En 2016, si la clasificación final se encuentra apretada, se puede decidir en puertos de paso como el Grand Colombier (15ª etapa) o en la etapa casi “unipuerto” con final en la dura subida de Finhaut-Emosson (Suiza). Lo cierto es que en este último bloque de etapas la diversión está asegurada. Tras la comentada llegad a Emosson (17ª), ya no hay descanso hasta el último día en París: cronoescalada de 17 km entre Salange-Megève (18ª); etapa corta ciclismo de montaña con final al pie del Mont Blanc (19ª) y, por último, una etapa con cuatro puertos de paso incluido el último y duro del Joux Plane –por cierto, una etapa muy parecida, aunque con menos distancia, a la que protagonizó Floyd Landis en el día de su famoso positivo en 2006–.
En resumen, un Tour de Francia que apunta a un recorrido montañoso, que sigue prescindiendo en gran medida de los kilómetros contra el reloj (en 2016 no abra crono por equipos), pero cuya emoción final por la lucha de la general dependerá de cómo llegue la carrera a la última semana. Si la distancia entre los primeros no es mucha, puede haber mucho espectáculo. Al menos, se espera que corredores netamente ofensivos como Quintana, Aru o Contador, se muestren agresivos ante el a priori favorito, Chris Froome. Por cierto, todo apunta a que el del próximo año será el último Tour de Francia que correrá Alberto Contador. ¿Se despedirá con una victoria a lo grande? Lo veremos dentro de poco más de 200 días.