De unos años para acá, las ruedas de perfiles altos son una de las grandes tendencias que tanto los profesionales –desde ya hace tiempo- como los cicloturistas y aficionados están incorporando a su repertorio material diario. Es más, en las carreras de ciclismo base –infantiles, cadetes, etcétera- cada vez se ven más niños con las rueda de marras. Una tendencia que parece imponerse, pero…
¿Realmente es lo más indicado?
Pues para los niños, lo cierto es que no. Por varias razones de peso. La primera, que generalmente son más caras que las que no lo tienen. Y el factor económico no sólo influye cuando hablamos de comprar las ruedas. Si no, principalmente, a la hora de repararlas. Hay que tener en cuenta que hablamos de niños que, como ya hemos dicho varias veces, en una carrera tienden a ir salvajemente y los bandazos son desgraciadamente demasiado comunes. Si un niño le toca la rueda de perfil a otro y se la rompe, el bolsillo se va a resentir mucho.
Otro problema, aunque relacionado con lo anterior: el viento lateral. Son ruedas que dan mucha guerra cuando hace aire. Imaginen la situación que describimos más arriba. Un pelotón lleno de niños con gran probabilidad de bandazos. Encima, entra aire lateral y esa posibilidad crece aún más.
En teoría –y en la práctica- las ruedas de perfil alto son buenas para rodar mejor en el llano. Pero benefician más a medida que mayor sea el peso de la persona que va sobre la bici. Teniendo en cuenta que hablamos de niños con peso rara vez mayor de 60 kilos, los beneficios no se van a notar. Así que a estas edades los inconvenientes son mucho mayores que las ventajas, puesto que a las debilidades propias de este tipo de ruedas se añaden los agravantes de la falta de cuidado de la bici que suele tener un niño en plena carrera.
Más adelante será tiempo de valorar si es buena opción la compra de unas ruedas de perfiles. Pero mientras tanto, es preferible emplear el dinero en cosas más útiles –una prueba de esfuerzo antes de empezar la temporada, una prueba biomecánica para evitar dolores o lesiones- ya que los materiales no tienen tanta relevancia como en profesionales. Conviene recordarlo siempre.